“El minimalismo no se trata solo de tener menos cosas, aunque ese enfoque general se le da, sino de también de tener menos preocupaciones, menos problemas, pocos objetivos en la vida, pero relevantes, significativos.”
El minimalismo, quitar sobrantes, quedarte con lo escencial, se esta contraponiendo al consumismo, en el que se valora la acumulación de poseciones. Pero para personas que ya de tenemos pocas cosas, ¿que beneficio nos dejaría? ¿Por qué nos interesaríamos en ello?
Cada que ves algo sobre minimalismo y como la gente que tenía tres autos se queda con uno, las que tenían dos casas se quedan con una y dices “¡Si yo no puedo comprar siquiera uno!” “¡No es que sea minimalista, es que estoy quebrado!”.
Tienes la razón. Se enfoca mucho en lo material. Sin embargo, la aplicación no es exclusiva del mundo material, aplica también al mental, emocional, espiritual. Existe un exceso de oferta hoy en día, nuestros sentidos estan siendo bombardeados día y noche y la vida se ha complicado.
Aún teniendo pocas cosas, tenemos demasiado en nuestra vida. Demasiados problemas, demasiadas preocupaciones, queremos abarcar demasiado, y el que mucho abarca, poco aprieta, como sabiamente dice el refrán.
Pensamos demasiado, “many mind”, tenemos demasiadas cosas en la mente, el trabajo, la tele, novi@, los deportes, la situación económica, salud, el que dirán, conflictos con compaleros o vecinos, etc.
Queremos más dinero, éxito, amor, salud, reconocimiento, fama, placer, etc. Aquí es donde entra el minimalismo, reduciendo la cantidad de cosas que queremos al mínimo, dejando solamente lo más importante, para podernos concentrar.
Caso contrario, nos extenderemos y nunca terminaremos, propiciando un sentimiento frustración, de enojo y rencor hacia la vida, los demás, la sociedad. El minimalismo, su aplicación, es tomar responsabilidad y profesar humildad. Humildad de reconocer que no puedes con todo lo que quisieras y responsabilidad de encargarte de lo que es más importante para tí.
Depende de ti, de que es lo que en verdad es importante, puede ser la salud, el bienestar, el amor. Como lo puede ser el placer, el dinero o el éxito. Solo tu lo sabes. Sin embargo, es una mejor idea tener un solo objetivo a la vez, dejemonos de cargar con todo el mundo sobre nuestros hombros, cada quien podemos con una sola cosa a la vez, aunque las demás tengamos que dejarlas de lado.
Este es el autentico minimalismo. Y aplicarlo no es sencillo. Las cargas emocionales las tienes que sacar, como vaciar la habitación, tenemos que ordenas nuestras cosas, empacarlas y sacarlas, así también nuestros deseos y cargas del corazón, requieren un esfuerzo para ordenarlas, clasificarlas, decidir que es lo escencial y dejar de lado lo demás. Esto no es nada sencillo, y muchas veces tenemos un fuerte apego por cosas que hemos mantenido por mucho tiempo.
Es simple pero no fácil, es díficil, sin ser complicado. Es duro, requiere de fuerza de voluntad y muchos no estamos preparados para dejar ir. Así que es poco a poco, a menos que estes en el momento correcto de tu vida, probablemente no puedas deshacerte de todo y quedarte con lo minimo, tendremos que hacerlo poco a poco, ir sacando todo lo que tengamos dentro que nos estorba. Será una experiencia catártica, bastante liberadora.
Y en ese minimalismo es en el que hemos de pensar, la vida puede ser tan simple como estes dispuesto que sea.