Manifiéstate, exprésate, libérate.
¿Has sentido ese cosquilleo que no te deja dormir? ¿Ese no se que qué se yo? ¿Esa extraña sensación como de que tienes ganas de no sabes qué? Pues es hambre, hambre intelectual, hambre creativa.
Cuando sientas esos síntomas, toma un lápiz y un papel, escribe, un poema, un verso, un libro. Dibuja, un garabato, un bosquejo, un cuadro. Puedes sustituir el papel por lo que quieras, por barro, por madera, por lo que quieras, por lo que tu espíritu te indique.
No pienses, solo hazlo, hazlo espontáneo, no te critiques, al contrario, diviértete, al fin y al cabo, ¿Qué puedes perder? No tienes nada que perder, mucho que ganar, como relajación, liberación, deleite, y por qué no, hasta algún dinero puedes hacer, o puedes mostrar tu obra y ganar algunos consejos o hasta algún cumplido, o simplemente, sentirte bien contigo mismo.
No es difícil, no debe serlo, debe ser sencillo, debe ser fluido, déjate llevar, deja que lo que llevas dentro salga, déjate sorprender por ti mismo. No te preocupes, hay mucha tela de donde cortar.
Dentro de cada persona existe un mundo, un universo interno que ansia salir, emerger, ansia ser liberado, ser notado, así que no temas, no dudes, cuando sientas las ganas, exprésate.
¿No sabes ni cómo empezar? Nútrete.
La mente se nutre. Se nutre con lo que alimentes, así que no le procures chatarra. Lee un buen libro, un libro divertido, dinámico, uno que te haga pensar. Ve una buena obra de teatro, disfrútala, coméntala. El cine es cultura también, claro, como lo es la música, pero no abuses por favor de los medios audiovisuales, por favor, el chiste es que medites, qué razones, que pongas a trabajar las neuronas, para que se fortalezcan, cual músculos que son, que se agilice tu sinapsis.
Estoy nutrido… ¿Qué sigue? Motivación. ¿Qué mueve tu mundo?
Motivarse no es difícil, solo debes permitírtelo. Quita de tu mente la duda, la envidia, permítete admirar a alguien más, admirar lo que hace, querer hacer lo mismo o algo mejor. Busca algún libro o alguna biografía de una persona exitosa en el campo de tu interés, es una manera muy buena de motivarte.
Busca obras de arte, grandes proezas del intelecto humano, admíralas, disfrútalas, piensa sobre ellas, pero sobre todo, desea intensamente hacer algo, lo que sea, no importa, lo importante es el hecho de hacerlo, ya verás que mientas lo haces más y más te motivas, más y más cosas por hacer se te ocurren.
O.K., ya me motive, ya me decidí ¿Ahora qué?
Ahora pasará lo que tú quieras que pase. Es tu mundo, no hay reglas que seguir. No pienses en esto como una tarea, como un trabajo, no lo es. Es un “antojo intelectual”, si, tu intelecto humano también tiene antojos, y como los antojos de los demás sentidos, este también te indicará naturalmente que es lo que se le antoja.
Sin prisas, sin presiones, saboréalo. Deléitate con el paladar de la mente, de la tatema, es una sensación única, maravillosa, de gozo. Así que adelante, goza, diviértete, manifiéstate, exprésate, libérate.